En pleno siglo XXI muchas salas siguen sin estar preparadas para que personas con incapacidades físicas puedan disfrutar de la MUSICA. También denunciamos que, en muchos lugares, según la edad no puedas disfrutar de un evento musical. En pleno siglo XXI la juventud puede acceder a otras cosas más negativas con facilidad pero depende donde vivas la edad varía para disfrutar de 2 horas con tu gente.
El pasado 24 de octubre en las pruebas de sonido de la sala Rock Star de Bilbao vivimos un hecho que define por si solo a una persona con el corazón tan grande como su cuerpo, Rafa Blas. A la entrada a la sala nos esperan los miembros del club oficial de fans de Rafa Blas. La sala está en una planta baja con escaleras y no dispone de acceso a minusválidos. Rafa saluda a una chica que va en silla de ruedas, Andrea, y se ofrece a bajarla a la sala en la silla con la ayuda de sus músicos y personal de acompañamiento pero es una silla con motor, muy pesada y podrían hacerle daño a la chica por lo que ella dice que se queda en la puerta a escucharlo desde la calle.
Rafa le firma, se hace una foto con ella y entra a la prueba de sonido. Una vez en el escenario avisa a sus guitarristas, Juan Saurín y Fer Varela, y les dice que preparen las guitarras acústicas y le sigan. Sube las escaleras de la sala hacia donde está Andrea y le dice: "He salido a cantarte". Coge una silla de una terraza cercana, se sienta junto a ella y le canta una canción.
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